En muchos países está comenzando o está a punto de hacerlo un nuevo curso escolar. Este hecho viene acompañado de muchos quebraderos de cabeza para los padres, pero también de mucha ilusión para los niños. Si es además la primera vez que va al colegio, toda la familia recordará ese momento para siempre. Quienes sin duda no van a tener problemas para recordarlo son los príncipes Victoria y Daniel, ya que ayer quedó inmortalizado para siempre el debut en la guardería de la pequeña princesa Estelle, futura Reina de Suecia.
Aprender en la naturaleza
Estelle Silvia Eva María, Princesa de Suecia y Duquesa de Östergötland, a la que llaman por su primer nombre, nació el 23 de febrero de 2012 en Solna, consolidando la familia que decidieron formar, a pesar de la oposición, una Princesa, Victoria, y su entrenador personal, Daniel. Por lo tanto tiene ahora 2 años y medio. Eran casi las 10 de la mañana cuando Estelle llegaba a su primer día de guardería sin mostrar un atisbo ni de nerviosismo ni de tristeza, sino todo lo contrario, ya que se mostraba relajada y sonriente. Su vida académica la va a comenzar en el centro Äventyret, La Aventura, que se sitúa a las afueras de Estocolmo, que tiene como objetivo para los siguientes tres cursos que la pequeña va a pasar en este lugar, el que logre adquirir conocimientos sobre el medio ambiente y se conciencie sobre el cuidado que requiere, y para ello disfrutará de pasar al aire libre gran parte de la jornada lectiva, aprendiendo de forma práctica acerca de la naturaleza.
Va a ser divertido
La niña iba vestida con una chaqueta de punto gris, una blusa con flores, vaqueros claros y zapatillas de deporte azul marino. Llevaba su fino cabello rubio recogido en una coleta y un lacito en uno de los lados sujetando parte de su melena. La princesa Estelle, que no dejó en ningún momento de sonreír, dejó claras sus expectativas ante esta nueva etapa de su vida, ya que ante la pregunta de su padre de si iba a ser divertido, Estelle respondió con un rotundo sí acompañado de un gesto de asentimiento con su cabecita.
Esperemos que se cumpla y que la pequeña Princesa disfrute de este momento tan especial, como cualquier otro niño.