¿Qué tal fresas? Yo deseando que llegue el día 23 para reunirme con Yara, Anna, Cris, etc. en el encuentro de mamás y papás bloggers de Valencia organizado por Familyblog y Kid&Us Valencia. Seguro que lo paso en grande y de paso aprendo, que también es lo importante. Prometo contaros como ha ido, pero hoy quiero hablaros de algo muy especial y que es posible que quizás no hayáis pensado.
Hace unas semanas estuve en la Feria Invitra en Valencia. Una feria a la que jamás hubiera asistido sino fuera porque conocí a Noemí. De Noemí ya os he hablado, es la creadora del blog Tic Tac Se me pasa el arroz que ha tenido mucha repercusión y por eso Noemí, ofreció una charla en la Feria. Y esa fue la razón principal de que yo asistiera. Hubo momentos en los que pensé “tierra trágame” como cuando acabó la charla y nos acercamos unas a otras. No nos conocíamos y todas dieron por hecho que yo tenía problemas para tener hijos. Yo no sabía en qué momento interrumpirles para decirles que yo ya era madre. Cuando llegó Noemí y les aclaró que yo ya tenía hijos, sus caras eran un poema. Me sentía fatal. La charla comenzó normal, Noemí estaba supernerviosa. Poco a poco subió la intensidad del momento y acabamos todos llorando como magdalenas cuando decidió leernos su post Necesito ser madre (ver más abajo). Lo más gracioso es que todas habíamos leído el post cuando lo publicó. Pero allí, viéndola con su barriguita creciendo nos “jartamos” de llorar. Fue un momento que no voy a olvidar. Por cierto si lo leéis, os adelanto que ella estaba embarazada cuando lo escribió pero entonces, no lo sabía. Después nos fuimos a tomar algo todas juntas. Yo le decía a su marido “mírala está pletórica”. Todos querían hablar con ella. Yo mientras tanto me dediqué a hacer vida social. A mi lado casualmente se sentó una chica que después de tres años intentándolo había tenido gemelos. Comenzamos a hablar y fue muy curiosa la conversación que tuve con ella. Le comenté que yo un día hablando con Noemí, intentaba consolarla porque no podía tener hijos y le decía todas las cosas negativas de ser madre. Lo típico, nunca más vuelves a dormir, quieres tirarlos por la ventana todo el rato, ya no tienes tiempo para ti misma, jamás vuelves a hacer nada tranquila… y mil cosas más que ya sabemos todas. Ella horrorizada me dijo: “Pero eso no debes decírselo jamás a una infértil”. Yo me quedé parada y ella siguió diciendo… “No quiero ofender a nadie, ni quiero decir que yo sea mejor madre que otras, pero lo que pasa es que las infértiles después de esperar tanto tiempo, nuestros hijos son tan deseados que las cosas que a vosotras os pueden molestar a nosotras no nos molestan tanto”. ¡¡¡NO ME QUERÍA OFENDER!!! Pues me ofendió y mucho. Frunciendo el ceño pensaba para mí: yo he parido, he pasado noches enteras sin dormir, he sufrido y sufro cada día pensando en qué será de mis hijos, si tendrán salud, si serán felices, si encontraran a esa persona que les quiera como se merecen… y millones de cosas más por las que las madres nos preocupamos sin sentido. Ella me explicaba que cuando su hijo le tiraba la papilla y la ponía perdida, sonreía pensando en la de veces que había soñado con ese momento. Y yo me seguía ofendiendo: ¿A ti no te molesta que tu hijo te tire la papilla y te ponga perdida? Pues a mí tampoco, a partir de ahora no me va a molestar nada. Dos horas más tarde cenando en un restaurante en la playa con mis hijos, ya me estaba enfadando y agobiando porque no paraban quietos. Y entonces, lo comprendí. Pensaba que la relación fértiles-infértiles era complicada pero que todo acababa cuando la persona infértil por fin lograba la paternidad. Y no es así. Ellas serán infértiles siempre y su forma de vivir la maternidad, lógicamente tiene que ser diferente. En cuanto a la ofensa, también se me pasó enseguida. No lo puedo evitar, la maternidad es mi punto débil. Muchas veces leyendo el blog de Noemí, también me enfado pero luego comprendo que es necesario que se desahoguen y que yo jamás sabré como se sienten porque para mí fue fácil. Y nunca podré ponerme en su lugar. Por eso quería hacer este post, porque seguro que muchas de vosotras al igual que yo, ni pensabais en estas cosas. Y cuando habláis con alguien con problemas de fertilidad puede que intentando aconsejarlas, en realidad le estéis haciendo un daño horrible. Y es que con el tabú que hay respecto a ese tema, ni nos enteramos. Así que de su post Las 10 Frases que no soporto que me digan (ver más abajo) os copio la siguiente lista de frases que no tenéis que decir jamás:
- Tranquila, no te preocupes que todo llega.
- Tranquila, ya verás como al final lo consigues.
- Lo importante es que no pienses en ello y hagas como si nada.
- Lo que tienes que hacer es relajarte y no estar nerviosa.
- Tranquila que todo pasa por algo en la vida.
- Lo mejor es que te tomes unas vacaciones y desconectes.
- Cuando no lo pienses, verás como te quedas embarazada
- Cuando estés relajada ya verás como te quedas.
- Ya verás como a la próxima sale bien.
Cuántas veces le hemos dicho a alguien: Conozco a una que se hizo 5 invitros y cuando ya pasó del tema se quedó embarazada. Tú piensas que le estás enviando un mensaje positivo y esperanzador pero no, no pueden soportarlo. Simplemente quieren tu apoyo. Que les digas que no se rindan, que lo conseguirán, que algún día tendrán ese bebé en brazos que tanto desean. Sin más historias ni cuentos chinos. La verdad que asistir a la feria fue toda una experiencia. Al día siguiente volví porque quería ir a la charla Madres solteras por elección. Fue muy interesante también, pero para saber más tendréis que leer el artículo en mi blog. Espero de verdad que os haya gustado leer este artículo, tanto como a mí escribirlo. Mil besos fresas Angélica Alvarez (@MamadeFresa) Más información en Tic Tac se me pasa el arroz:
- Necesito ser madre: http://tictacsemepasaelarroz.blogspot.com.es/2013/06/necesito-ser-madre.html
- Las 10 Frases que no soporto que me digan: http://tictacsemepasaelarroz.blogspot.com.es/2013/03/las-10-frases-que-no-soporto-que-me.html