Es fundamental saber aplicar algunas técnicas básicas que nos ayuden a alcanzar una correcta educación infantil.
Como experta en psicología infantil, aprovecho este especio para que, juntos, repasemos aquellas técnicas que mejoran el buen comportamiento de los niños.
Vuestro objetivo, como papás y mamás, debe ser siempre AUMENTAR EL NÚMERO DE CONDUCTAS POSITIVAS, y, para ello, vamos a utilizar las llamadas ALABANZAS, RECOMPENSAS o PRIVILEGIOS.
Pero, ¿cómo empezar con estas técnicas? Hay que conseguir los siguientes objetivos al aplicarlas:
- Detectar el comportamiento correcto y el incorrecto.
- Aplicar las técnicas con frecuencia, paciencia y rapidez.
- Dirigir la atención solo a aquellos comportamientos en los que deseemos aumentar su frecuencia de aparición.
ALABANZA | Claves para alabar y potenciar el buen comportamiento de mis hijos:
- Debes hacer una alabanza descriptiva, incluyendo comentarios sobre la conducta. Por ejemplo: «Has hecho muy bien en recoger los juguetes después de jugar».
- Debes incluir comentarios positivos y motivadores para el niño.
- Debes alabarle comportamientos positivos aunque, en principio, parezcan poco importantes.
- Debes ser sincera, si solo se ha hecho una parte de la tarea debes recompensarle por ella, pero, luego, hacer una pausa y añadir lo que falta aún por hacer. No utilizar la frase “bien…pero” pues en este caso se presta más atención a la crítica que a la alabanza.
- La alabanza solo debes utilizarla durante o inmediatamente después de la respuesta que se desea incrementar.
- Es conveniente cambiar de alabanzas para evitar la monotonía.
- Tu tono de voz ha de ser agradable y debes evitar cualquier sarcasmo, es decir no enviar mensajes del tipo: «Cariño, ¡por fin has hecho los deberes, no me lo puedo creer!».
- La alabanza seguida de una sugerencia de comportamiento inadecuado puede evitar conductas inadecuadas. Por ejemplo: «Gracias por haber cerrado la puerta despacio y no haber dado portazo».
- El contacto físico como sentarse cerca, abrazos, besos, una palmadita, etc., puede ser un reforzador de buenas actitudes muy poderoso, lo mismo que realizar alguna actividad juntos.
RECOMPENSAS O PRIVILEGIOS | ¿Cómo y con qué puedo premiar a mi hijo cuando se porta bien? Sugerencias:
- Debemos pensar antes de actuar las recompensas más adecuadas para el niño.
- El uso de recompensas debe servir solo para fortalecer conductas deseadas, nunca debe incrementar conductas disruptivas o agresivas.
- Deben darse inmediatamente después de conseguirse la conducta deseada. Nunca antes de que se produzca esta conducta.
- Los privilegios deben ser utilizados cada vez que el niño realice la conducta concreta que se desea incrementar hasta que ya se convierta en costumbre y no haga falta premiarle.
- Los privilegios deben cambiarse cada cierto tiempo para evitar que el niño olvide su importancia y se sacie.
- Hay que dar las recompensas en proporción a la dificultad de la conducta que se desea premiar. Cuanto mejor se porte, una recompensa más importante.
En conclusión, la constancia a la hora de aplicar estos consejos os puede servir de guía para conseguir reconducir el comportamiento de vuestros hijos. No se trata de poner continuos castigos, sino de alabar y recompensar aquello que haga correctamente.