Puesto que actualmente el único criterio para estimar el éxito o el fracaso de los niños, son las calificaciones, el fracaso se traduce en insuficientes, que evidentemente suelen ser muy frecuentes y produce en los padres mucha preocupación y provoca que no sepan que hacer con ese niño o joven.
No estamos hablando de uno o dos suspensos en alguna evaluación, que pueden ser absolutamente normales y recuperables, sino de esos niños cuyas notas son excesivamente negativas al finalizar el curso escolar.
¿Qué factores influyen en el fracaso escolar?
Memoria: Esta capacidad es fundamental para el rendimiento escolar. Se puede trabajar y estimular con recursos y actividades divertidas cómo juegos. Pero, tan fundamental es que memoricen lo que estudian como que lo comprendan. Por eso, tendrán que comprender primero y memorizar a continuación. Deben memorizar de forma adecuada, es decir, relacionando lo nuevo con los conocimientos ya adquiridos.
Autoestima y autoconcepto: Habitualmente los suspensos esconden una autoestima sumamente baja en los niños. Si sienten que no son aptos para lograr las metas que se establecen, será imposible que las alcancen. Tenemos que cuidar el concepto que tienen de ellos mismos y devolverles una imagen positiva de quienes son y de lo que hacen. Debemos instruirles para que integren los errores en su aprendizaje y no hundirse ante los obstáculos ya que todos los problemas tienen solución.
Ambiente familiar: El modelo educativo familiar que ofrecemos a los niños es fundamental para su crecimiento. Los niños necesitan un entorno abundante de estímulos, en el que se encuentre implicado y en el que descubra una optima implicación de la familia en su vida educativa
Lecto-escritura: Es otro de los pilares del éxito escolar. Leer y escribir correctamente es imprescindible para todas las asignaturas y si no lo dominan, los cimientos se tambalean. Debemos fomentar desde pequeños la importancia de la lectura y la escritura. Si observamos dificultades en este campo, es preciso subsanarlo lo antes posible.
Motivación: El desinterés y la desmotivación por todo lo que está relacionado con el colegio puede ser un motivo contundente que lleve al fracaso escolar. Esto les lleva a la falta de esfuerzo y al abandono de sus tareas y deberes.
Atención: La atención en el colegio es fundamental para obtener éxito en las materias por lo tanto la falta de atención les puede llevar a la ruina. Desde muy pequeños debemos habituarles a tareas que les haga centrar su atención durante períodos de tiempo correspondientes a su edad.
Hábitos de estudio: Cómo a todo a estudiar también aprendemos por lo tanto es muy importante que conozcan y aprendan técnicas de estudio que va a fomentar el aprovechamiento total y productivo de las horas de estudio. – Proporcionarles técnicas de estudio que les permitan aprender de manera rápida, eficaz, optimizando el tiempo y disponer de un lugar adecuado de estudio tranquilo, cómodo, personal y en el que tengan todo lo necesario para llevar a cabo sus tareas.
Capacidad del alumno: Ocasionalmente, la dificultad la encontramos en que el niños presenta una baja capacidad intelectual o alguna dificultad del aprendizaje o por el contrario, una elevada capacidad, en estos casos es necesaria una atención con profesionales especializados lo antes posible ya que y si no se detectan a tiempo pueden llevar a un fracaso escolar inminente y cada vez más difícil de paliar.