¿Cómo ven los bebés? Juegos para estimular la visión
La agudeza visual del recién nacido es limitada, y se va desarrollando en los primeros meses de vida. Al nacer, los niños ven bien a una distancia de aproximadamente unos 20 ó 30 centímetros. Esta es la distancia a la que se sitúa la cara de mamá o papá cuando están en brazos.
Además, su visión se va desarrollando desde la línea media (el centro de su cuerpo) hacia fuera. Por tanto, podrá percibir mejor los objetos que le enseñemos en esta zona que por los lados.
Los bebés nacen programados para fijarse preferentemente en las caras humanas. Por tanto, pasarán más tiempo mirando la cara del adulto que un objeto con el que pretendamos llamarle la atención.
Se sabe que en los primeros meses de vida perciben los colores en contraste claro/oscuro (blanco y negro, por ejemplo). Esto lo observamos cuando al tener en brazos al niño, vemos que le llama la atención nuestros ojos, por el contraste de color que se produce entre el iris y el globo ocular, y además porque están en movimiento.
Esta preferencia por el contraste claro/oscuro también la observamos cuando dirigen su atención a las luces y sombras, ya que son formas nuevamente en movimiento y con los colores en contraste. Por ejemplo, suelen fijarse en las hojas de los arboles cuando van paseando por la calle.
Conocer cómo ven los bebés nos ayuda a saber cómo estimularles y a elegir qué tipo y colores de juguetes elegir. Actividades para estimular la visión:
- Colocar un móvil en su habitación o encima de su cuna a una distancia no superior de 50 cm. Podemos elegir entre los diferentes modelos que hay en el mercado (muñecos, formas, luces,…) o incluso hacerlo nosotros mismos.
- Jugar con luces y sombras. Con una linterna (con una luz no muy intensa) podemos hacer diferentes juegos: apagar y encender la luz, proyectar la luz sobre una pared para generar sombras o hacer sombras “chinescas” con nuestras propias manos.
- Emplear juguetes con colores en contrastes, como blanco/negro (sonajeros, libros,…). Elegir juguetes que tengan este tipo de colores ya que serán los que le llamen más la atención.
- Si tenemos una pecera en casa podemos poner al bebé frente a ella para que observe el movimiento y el contraste de colores.
- Hacer botar una pelota de pin-pon delante de tu campo visual. Con pelotas de distintos colores o blancas/negras podemos botarlas alternativamente delante de ellos para que sigan el movimiento.
- Enseñarle dibujos de caras hechos en contraste. Podemos diseñar nosotros mismos nuestras propias láminas de contraste, dibujando en un folio o cartulina blanca caras sencillas (boca, ojos, nariz) con rotulador negro y mostrárselas.
Miriam Lara y Elvira López-Mántaras.
Psicólogas Infantiles y Expertas en Atención Temprana.