Una experiencia que vale la pena realizar con los niños y guiados por expertos en micología, donde no solo aprenderemos a diferenciar las setas comestibles y las tóxicas, sino tambien degustaremos al final aquellas setas que son especiales para el paladar acompañados de otros productos de la comarca.
Nuestra primera salida a la montaña a buscar setas, debería hacerse con un experto en setas, que nos oriente, ayude y facilite acercarnos al sorprendente mundo de las setas, no solo para diferenciar las que se comen de las que no, sino para apreciar la gran variedad que tenemos en España, cada una con su propiedad, forma, color, tacto y sobre todo sabor. Yo tuve una experiencia este fin de semana en el Mas de Borrá,s un Centro de Turismo rural en los bosques del Parque Natural de Peñagolosa, ya en el límite de Castellón con Teruel donde el Mas ofrece actividades de fin de semana para recoger y degustar setas con los niños.
Un primer aspecto a tener en cuenta es que debemos ir con una cesta de mimbre y una navaja, para que las esporas de las setas que recogemos se dispersen por el monte mientras andamos, evitando por supuesto bolsas de plástico. A partir de aquí nuestra mente debe estar abierta a explorar debajo de cada árbol, matorral y piedra, donde se puede esconder tan preciado tesoro. Si vamos con un guía podemos diferenciar con él las setas comestibles de las toxicas, aquellas que tienen propiedades curiosas, las más raras, donde no siempre ser una seta bonita se relaciona con que sea comestible.
Es importante estar pendiente de las lluvias, y tener algún amigo que nos informe de los lugares más adecuados donde ir a recoger setas, pero especialmente hemos de conocer la normativa sobre recolección de setas ya que en algunos municipios hay un máximo de kilos por persona y dia, y debemos respetar las propiedades particulares. Por lo demás adelante con la aventura de adentrarse en el bosque y con cuidado recoger estas setas que además de llamar la atención a grandes y pequeños nos aportarán una rica gastronomía rural en el que podemos degustar setas de todos los sabores, texturas y olores.