Los niños, el verano y los deberes

Los niños, el verano y los deberes 8 agosto, 20131 Comentario
Vacaciones con niños

¡Hola Chic@s! ¿Cómo va ese verano? El mío está siendo espectacular. Era justo lo que necesitaba. Un veranito tranquilo, con mis niños y disfrutando del Vacaciones con niñosfresquito de mi querida tierra gallega.  Casi cuatro semanas han pasado desde mi último post y han ocurrido muchas cosas. Me acuerdo mucho de vosotros, quiero contaros cosas pero como ya sabéis, hacer que las vacaciones de los niños sean inolvidables es agotador y apenas me queda tiempo para sentarme a escribir.

A los pocos días de llegar, ocurrió el accidente de tren en Santiago de Compostela. Un tren que iba con destino Ferrol, mi ciudad y en el que podía haber ido yo con mis hijos, sólo de pensarlo… Pero a pesar de la tragedia, los gallegos no fallaron. Siempre solidarios, y manteniendo la calma y la educación. Toda España se sintió orgullosa de nosotros y yo, como gallega más orgullosa todavía. Fue el tema de conversación por aquí durante muchos días. Todos pensábamos lo mismo: ¿y si me hubiera tocado a mí?  Pero eso, no hay que pensarlo. Con todo esto, hoy me toca volver a recordar la importancia de disfrutar a tope el presente.

Y yo lo disfruto. Por eso este verano quería dedicarme a los niños porque aunque no os lo creáis, yo como muchas otras madres blogueras y participativas, dedicamos mucho tiempo a realizar actividades relacionadas con nuestros hijos pero eso no implica necesariamente que estemos con ellos.  Estas semanas no he parado, playa, parque, cine, manualidades, y… deberes.

Sí deberes, porque otro de mis objetivos era conseguir que mis hijos volvieran al cole en septiembre sin olvidarse de todo lo aprendido durante el curso. Y es que lo reconozco, para esto, soy muy mala madre. En vacaciones me da una pereza horrorosa ponerme a hacer deberes con ellos.  Cuando volvemos al cole, siempre hay una primera reunión, en la que las madres comentamos lo que han trabajado nuestros niños en verano, y yo… ¡¡puff!! Tenía que decir: poco, poco…  Y cuando la profesora dice “¡Ah! Y enhorabuena a los papás que habéis trabajado con vuestros hijos, se nota una gran diferencia entre los que han trabajado y los que no” En esos momentos yo quiero que me trague la tierra y me doy cuenta de lo vaga que soy para esto. Y es que alucino con los niños  que hacen las fichas que nos dan las profes, la primera semana de vacaciones  y luego sus madres tienen que comprarles los típicos librillos de ejercicios que publican las editoriales en verano, como nuestro “Vacaciones Santillana” ¡Qué recuerdos eh!

Así que al poco de llegar a Galicia, cogí las hojas con las recomendaciones de las profes y me puse a leer detenidamente toooooooodo lo que teníamos que hacer ¡Madre mía! Casi me desmayo leyendo, quizás por el doble esfuerzo. Primero el esfuerzo de traducir el valenciano que aunque en conversación lo entiendo muy bien, a la hora de leer, me cuesta un poco más. Y segundo, por todas las cosas que se supone que tenemos que hacer. Yo lo leía, y me preguntaba ¿Pero en qué momento vamos a jugar? Si para hacer todo esto necesitamos las 24 horas del día.  Todo tiene que ser un aprendizaje. Cuando pongáis la mesa, que cuenten los cubiertos, quitáis uno y que hagan la resta. Cuando estéis en la playa contáis las conchas en castellano, en valenciano y en inglés,… Bueno, bueno, pero si con vigilar que no se me pierdan los niños entre la gente ya tengo suficiente, estoy yo como para ponerme a contar conchas en inglés. Y las profes nos dicen: “Con diez minutitos al día es suficiente” ¡¡¡Pero si conseguir que se sienten a hacer algo ya me lleva media hora!!!  Y es que el verano es un descontrol. Me pregunto si alguna consigue que sus hijos lleven un horario normal. Yo lo retraso todo dos horas. Nos levantamos a las 10:00 comemos a las 15:00, cenamos a las 22:00 y nos acostamos a la 1:00 de la madrugada. Cuando vamos al cole, siempre digo que me encanta estar de vacaciones y no tener horario pero la verdad es que después de mes y medio ya nos hace falta esa rutina diaria, volver a nuestros horarios habituales y por qué no decirlo, librarnos un ratito de nuestros monstruitos.

¿Y vosotros, cómo lleváis el verano?

Mil besos con olor a eucalipto de Galicia

Angélica Alvarez  (@MamadeFresa)

 

[was-this-helpful]