Muchas veces, especialmente para las mamás primerizas, esta «revolución» emocional y sensitiva puede resultar inesperada y se hacen constantemente preguntas como: ¿Qué me está pasando? ¿Esto es normal? ¿No debería estar feliz, en lugar de estar asustada y hasta molesta?
Las clases de preparación al parto pueden ser un buen aliado, ya que en ellas puedes compartir tus inquietudes con otras mujeres que están en tu misma situación, te sentirás acompañada y comprendida. Además allí, te explicarán todos esos cambios que está sufriendo tu cuerpo a nivel hormonal, físico y psicológico.
Otro factor importante, es compartir tus variables sentimientos con otras personas como a tu pareja, amigos o familiares, puesto que ellos sabrán escucharte y te aconsejarán.
Cronología de las emociones en el embarazo
En el primer trimestre de embarazo destaca la emoción de la sorpresa. Paralelamente, algún malestar físico puede aparecer e interferir en tu estado de ánimo. Suelen aparecer miedos con respecto a la continuidad del embarazo, puesto que en este trimestre se encuentra la mayor probabilidad de aborto. Por eso, muchas mujeres eligen no comunicar su próxima maternidad antes de estar seguras de que todo va bien. Es muy habitual que disminuya el deseo sexual y que se esté más sensible y con ganas de llorar. Se está muy cansada y con más somnolencia e inevitablemente se tiende a hablar mucho del tema «embarazo», debido a la preocupación que este produce en tu vida, sobre todo, si se es primeriza.
En el segundo trimestre se recupera el buen estado físico, se deja de estar tan cansada y tan somnoliente. Aparece la ansiedad por «sentir al bebé» y se estrecha la relación con el ginecólogo y la matrona, lo que hace que la futura madre tenga más confianza y seguridad y, en definitiva, más energía. La embarazada se acerca más a la pareja, retoma más intensamente su vida sexual. Comienza a concienciarse con su cambio de vida y empieza a prepararlo, planean cambios en la casa, elección de ropa, mobiliario, coche… El estado de ánimo se estabiliza.