Estos miedos infantiles son positivos, puesto que les ayudarán a enfrentarse de forma adecuada a situaciones difíciles y amenazantes con las que se encontrarán a lo largo de su crecimiento, por lo que no te preocupes por tu niño/a porque la inmensa mayoría son transitorios.
A continuación, te ofrezco algunos consejos para sobrellevar mejor diferentes situaciones en las que se puede manifestar algún miedo infantil:
¿Qué debo evitar para no potenciar los miedos infantiles?
- Ignorar, ridiculizar o burlarte del miedo del niño.
- Obligar al niño a que tome contacto con la situacion temida. Las «terapias de choque» no son recomendables para un niño.
- Intentar convencer de que la situación o el objeto no dan miedo y, por lo tanto, hay que ignorarlo y ya está.
¿Qué debo hacer en algunos casos para evitar que mi hijo tenga miedo?
- Explicacion verbal de que no existe peligro alguno. Transmítele seguridad pero que no perciba órdenes ni burlas.
- Demostración práctica de lo que se explicó anteriormente.
- Dar ejemplos de situaciones en las que no hay miedo pero sí que está la situación u objeto amenazante.
- Explicación de cómo alguien conocido o apreciado por el niño sentía miedo por algo y cómo aprendió a dejar de tenerlo.
¿Qué hay que hacer siempre para evitar los miedos infantiles?
- Respetar lo miedos aunque sean inexplicables e irracionables.
- Debemos utilizar la palabra miedo de forma natural y no tratarla como una palabra maldita o prohibida.
- Mostrar al niño la necesidad y el deseo de estar a su lado como forma de ayudar y compartir el miedo.
Siguiendo estos consejos, debes conseguir que tu pequeño/a:
- Desarrolle destrezas con las cuales pueda tratar los objetos y situaciones que teme.
- Pueda acercarse al objeto o situación temida, cada vez de forma más confiada.
- Gradualmente transforme el objeto o situación temida en algo familiar.
En conclusión, la psicóloga infantil nos explica que:
- Los miedos son reacciones emocionales que forman parte del desarrollo normal de los niños. Es lógico y habitual que los niños padezcan ciertos miedos, no obstante, en aquellas situaciones en las que se crea que son excesivos, es importante consultarlos con un profesional para aumentar la seguridad en los niños y evitar posibles agravamientos.