Cuando tu hijo no se encuentra bien y sus síntomas te general confusión sobre si llevarlo o no al médico, es posible que en muchas ocasiones el instinto os haya ayudado muchas veces, pero la preocupación puede hacerte dudar y por ello vamos a darte algunos consejos para poder tomar la decisión más adecuada.
El agobio puede hacer que al valorar lo síntomas que presenta tu hijo pueda llevarte a confusión. Por ejemplo, el motivo más frecuente de consulta en urgencias es la fiebre alta, pero no existe relación directa con entre la fiebre y la gravedad. Puede ocurrir porque los bebés aún no regulan bien su temperatura corporal y la aumentan mucho sin que haya una causa aparente.
¿Cómo saber si debo llevarlo a urgencias?
Una de las claves es observar su estado general, si el pequeño está activo, esto puede indicarte que no tiene nada grave. Aun así, ante la duda, siempre hay que acudir al médico y recordar que no hay que darle medicamentos, incluso aunque se los hayan recetado antes.
Si tu pequeño tiene unos meses recuerda que todos los síntomas son más graves en ellos porque no tienen los mismos recursos que los niños más mayores para enfrentarse a la enfermedad. Por ejemplo, la bronquiolitis en niños mayores de 6 meses se considera una dolencia leve, pero en lactantes puede ser una enfermedad grave. Y lo mismo pasa con la fiebre de 40 grados, cuando más pequeño sea tu hijo es conveniente que ante síntomas que indiquen estas dolencias se acuda al médico.
¿Qué hacer ante un signo de alarma en tu hijo?
Recurre a su pediatra
Si el pediatra del niño puede atenderos, lo mejor es acudir a su consulta. También es posible que en función de la dolencia necesites acudir a especialistas pediátricos como cardiólogos, ginecólogos o traumatólogos que sean especialistas en la dolencia que presente tu hijo en ese momento, si bien es cierto, puedes ser derivado a este especialista, si tu pediatra de cabecera la considera oportuno.
Llama al médico de urgencia
Si crees que tu hijo puede estar ante una dolencia importante, puedes hacer una consulta telefónica a un pediatra de urgencia e incluso solicitar su visita a domicilio.
Ve al centro de salud más cercano
Si ninguna de estas dos opciones es posible, comprueba si el centro de salud más cercano tiene pediatras de guardia. Y si cuenta con ellos no dudes en llevar a tu pequeño para que le hagan una evaluación.
Llévalo al hospital
Si tu ambulatorio más cercano no dispone de este servicio, no dudes en acudir a las Urgencias de un hospital. Es primordial que quien examine a tu pequeño sea un pediatra, en los hospitales podrás encontrar siempre un especialista. Recuerda que las urgencias hospitalarias son siempre cuando los síntomas del pequeño revisten gravedad.
¿Cuáles son los síntomas más graves en los pequeños?
En la siguiente lista se detallan los síntomas más graves en niños, y por los que no deberías dudar en llevarlo al médico. Según su intensidad deberás valorar llevarlo a urgencias o al pediatra de tu centro de salud.
- Fiebre alta
- Decaimiento intenso
- Disminución del nivel de conciencia
- Petequias
- Vómitos
- Traumatismos
- Convulsiones
- Diarrea
- Heces con sangre
- Alteración de la respiración
- Palidez en labios y conjuntiva