La verdad es que como madre de 3 niños que han nacido en la era 3.0, me preocupa bastante hasta qué punto las nuevas tecnologías, o ya no tan nuevas, pueden afectar a nuestros hijos. Desde el problema de los adolescentes enganchados a su teléfono móvil hasta los más pequeños con las tablets con miles de aplicaciones para jugar.
¿Dónde está el límite? Pues creo que no es fácil establecerlo. Pero si nos guiamos por el sentido común, no es tan difícil encontrarlo.
Los datos están ahí: entre los niños de 6-9 años el 83% usan tablets, y en la franja de edad de 2-5 años lo hacen un 71%, según el estudio de Communicus. Ante esta realidad imparable los padres no podemos negarnos a que las utilicen, de hecho no lo hacemos, pero muchos nos preguntamos hasta qué punto es bueno.
En el equilibrio está la solución. Yo soy madre de 3 hijos y los tres utilizan dispositivos móviles. La mayor, de 12 años, tiene smartphone, mientras que los pequeños, de 5 y 3 años, se descargan apps en nuestros teléfonos y tablets.
Se acerca la Navidad, y estoy segura de que les gustaría tener una tablet porque me piden continuamente la mía, pero yo me resisto por miedo a que hagan un uso excesivo. Está claro que como en todo, los límites los ponemos los padres: basta con supervisar el contenido y existen muchísimas aplicaciones que ayudan en el desarrollo de nuestros hijos: música, dibujo, aprender a leer, cuentos… y un largo etcétera.
Existen muchas páginas que nos ayudan a elegir cuáles son las mejores y las más indicadas para cada edad. De hecho, las jugueteras se han lanzado al mercado digital ofreciendo sus propias tabletas. A un mes de la Navidad, seguro que entre los juguetes más demandados estarán estos dispositivos móviles para niños: desde los que van con sus dibujos animados favoritos, pasando por los fabricados por marcas de juguete, o tablets de adultos tuneadas para niños, bastante más económicas.
El abanico de precios también es muy amplio: desde 250 euros, para los bolsillos más pudientes, o unos 70 euros que incluyen funda de colores anti rotura y con auriculares a juego. Yo os recomiendo que busquéis bien antes de realizar la compra, existen webs especializadas que os ayudarán a elegir cuál es la mejor tablet para vuestros hijos.
Por mi parte, creo que me voy a resistir un año más , y los pequeños Pablo y Clara tendrán que conformarse con utilizar de vez en cuando la nuestra, no es que esté en contra pero prefiero que continúen desarrollando el juego simbólico, la imaginación, y la creatividad. Y vosotros, ¿qué opináis?