Cuando prepares los alimentos de tus hijos, recuerda incluir todos los nutrientes que él necesita para su desarrollo. La anemia infantil, aunque es menos frecuente, afecta a un porcentaje de niños debido a la falta de hierro en su dieta diaria.
Este mineral es muy importante para nuestros niños porque fortalece sus defensas, activa el grupo de vitaminas B, tan necesario para su crecimiento y además les otorga mayor resistencia física.
Tu peque debe consumir hierro de la carne de vaca o de pollo y del pescado. También en legumbres como las lentejas, garbanzos o la soja. No te olvides de las verduras, en los guisantes, espinacas y el brócoli lo contienen.
En general, un niño, requiere consumir una alimentación balanceada donde la ingesta de golosinas o comida chatarra sea limitada por los padres desde muy pequeños. Si tu hijo se muestra cansado la mayor parte del tiempo y no logra concentrarse en los estudios, es posible que algo esté fallando en su alimentación.
Los médicos recomiendan que las infusiones o el café sean menos consumidos por los niños, por ser inhibidores de hierro. Mientras lo opuesto sucede con la vitamina C, ésta es fundamental para la absorción del mineral en el organismo del menor.