Sabemos que la crianza de los hijos es tarea de los padres, pero en ocasiones son los abuelos quienes asumen este rol con gran determinación.
Sucede en muchas familias, especialmente en aquellas donde el pequeño es concebido en una pareja joven que no tiene la madurez emocional necesaria para educar un niño. Estos chicos buscan en sus familias ayuda para aprender a criarlos. Así, los abuelos aceptan cuidar a los nietos hasta que sus hijos se sientan totalmente seguros de asumir su rol, sin saber que más adelante será más complicado ser vistos como una autoridad para sus pequeños.
Los abuelos estarán para consentir a los nietos, entretenerlos y cuidarlos ocasionalmente, pero su compromiso nunca debería tomarse como una obligación; somos nosotros quienes debemos educar a nuestros hijos y enfrentar también aquellas situaciones difíciles que a todos los padres nos toca vivir en algún momento. No nos privemos de acompañarlos en los mejores años de sus vidas.