Hablamos con frecuencia de lo importante que resulta para los niños la práctica de ejercicio físico diariamente. A veces las largas jornadas escolares más las actividades que realizan después y las tareas que les encargan sus maestros para realizar en casa imposibilitan el que los niños tengan tiempo para hacer deporte. Una de las alternativas sería ir caminando al colegio. Ahora se ha realizado un estudio que analiza por primera vez la distancia que los niños están dispuestos a recorrer para ir al colegio caminando cada día.
A más edad más distancia
La Universidad de Granada en España junto con las de Cambridge y Anglia del Este en Reino Unido han realizado un estudio en el que se muestra cuál es la distancia que recorrerían al día los menores para ir al centro escolar y cómo ésta aumenta con la edad. El estudio indica que la distancia entre el hogar y la escuela es determinante para que se pueda recorrer andando o no.
En el estudio participaron 2.064 niños ingleses que fueron analizados durante varios años: con 10, con 11 y con 14 años. Tenían en cuenta la manera en la que los niños acudían a estudiar cada día, a pie, en bicicleta, en coche o en trasporte público, y si iban caminado tomaban en cuenta la distancia que recorrían.
Tras realizar el análisis se observó que a los 10 años los niños caminaban 1,4 kilómetros al día para ir a clase, a los 11, 1,6 kilómetros y a los 14 casi se doblaba la distancia, alcanzando los 3 kilómetros. Los autores de este estudio destacan que ha servido para conocer cuál es la distancia máxima que los menores están dispuestos a recorrer a pie para estudiar y que como es lógico aquellos que viven más cerca del centro en el que estudian están más predispuestos a ir andando. Dicen que además servirá para establecer las distancias a partir de las que hay que facilitar a los estudiantes el trasporte escolar.
Un estudio interesante y que puede que haga que nos replanteemos la manera en la que nuestro hijo va a su centro educativo cada día.