Decir que la lactancia materna es la mejor a opción a la hora de alimentar a nuestro bebé no supone ninguna novedad. Sin embargo no por ello dejan de interesarnos todos aquellos estudios que refuerzan esta idea. En este artículo veremos el último publicado que aporta nuevos datos.
La leche materna previene los problemas estomacales
La Escuela de Medicina y la Facultad de Artes y Ciencias de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, Estados Unidos, acaba de publicar un estudio en el que se conocen nuevos beneficios que reporta la leche materna al bebé. Así, se muestra que tiene una influencia muy beneficiosa en la composición, diversidad y estabilidad de la microbiota intestinal del pequeño. Todo ello sirve para preparar el estómago del bebé para dar el paso a la alimentación sólida y prevenir los problemas estomacales. De lo contrario esta transición es más dura y puede producirles a los pequeños cólicos y dolores estomacales.
El estudio
Para llegar a esta conclusión se analizaron las dietas, heces y salud en general de 9 bebés de entre 2 y 14 semanas, y se observó que se diferenciaba mucho su microbiota dependiendo de si eran o no alimentados por lactancia materna exclusiva. En los bebés que eran alimentados con leche materna encontraron una cantidad de la bacteria bifidobacterium que se considera beneficiosa superior a la que tenían los pequeños alimentados de otra manera.
El estudio no se queda aquí y continúa para conseguir más datos, ya que piensan que los microbios del intestino tienen potencialmente un papel muy importante en la salud futura del bebé, teniendo incidencia en la obesidad, las alergias y los problemas gastrointestinales, como el síndrome del intestino irritable.
Sin duda un estudio interesante que viene a reforzar la importancia de alimentar a nuestros bebés a través de la lactancia materna de forma exclusiva, al menos durante los seis primeros meses.