La educación de los niños es un tema que nos preocupa en gran manera a todos los padres. Pero el ritmo actual hace que cada vez tengamos menos tiempo para compartir con ellos los momentos que dedican a su formación. Y es que cada vez más ambos progenitores tienen largas jornadas laborales más luego ocuparse de las rutinas del hogar. Sabemos que van al colegio, que cuando llegan a casa tienen que hacer los deberes y en época de exámenes estudiar más. Pero quizás esto no sea suficiente.
Mejor si los padres se implican
Según un estudio que ha sido elaborado por el Consejo Escolar del Estado en España, el rendimiento escolar de los niños mejora si los padres se encargan de supervisar sus deberes. Para llegar a esta conclusión se encuestaron a más de 13.000 familias. También influye en esa mejora que tengan altas expectativas acerca de sus estudios y los hábitos de lectura. Y en el ámbito escolar que los niños tengan un sentido de pertenencia al centro educativo, que los profesores sean accesibles y que los padres y tutores participen de las actividades escolares.
También muestra este informe como las familias que más se implican en la educación de sus hijos son las que tienen un mayor nivel de estudios, sobre todo las madres, y una mayor cantidad de libros en el hogar. Y también participan más aquellas que destinan más recursos a la educación de sus hijos y las que los padres tienen una mayor edad.
Lo que sí han percibido que la implicación de los progenitores en la educación va en descenso según crecen los hijos. Y que tienen la idea de que a partir de la enseñanza secundaria son los profesores los que deben encargarse de ello.
Lo que está claro es que es un tema que nos tiene que interesar. El progreso que tengan nuestros hijos en los estudios será lo que a su vez les permita poder hacerlo en la vida. Por lo tanto dediquemos nuestro tiempo a su educación.