Dicen que las buenas noticias no son noticias, afortunadamente está es solo una frase hecha y siempre podemos encontrar alguna cada día. No hay mejor noticia que el nacimiento de un bebé. Y cuando llegan al mundo dos, todavía más. Por eso el Principado de Mónaco vive un momento de felicidad compartida tras la llegada al mundo de dos nuevos miembros a la Familia Real.
Gabrielle primogénita, Jacques Heredero
Ayer 10 de diciembre la princesa Charlene de Mónaco se convertía en madre por primera vez y, como comentábamos, por partida doble. Según el comunicado que emitió palacio sabemos que a las 17:04 horas vino al mundo Gabriella Thérèse Marie, que recibirá el título de Condesa de Carladès y a las 17:06 nacía su hermano Jacques Honoré Rainier, que será Marqués de Baux y se convierte en el Heredero. Esto es así debido a que en el Principado aún se encuentra en vigor la «Ley Sálica», según la cual el varón prevalece por encima de la mujer, ya que la niña es la primogénita. La noticia se hizo pública apenas dos horas después del nacimiento, cuando sonaron 42 cañonazos, 21 por cada niño. Y después comenzaron a sonar las sirenas de los barcos que había en puerto. El palacio está iluminado en rojo para celebrar este día que se convertirá en fiesta nacional.
Embarazo muy esperado
El embarazo se había anunciado en el mes de mayo y venía a terminar con la preocupación de los monegascos por la ausencia de hijos. Después en el mes de octubre, y tras varios meses de insistentes rumores se confirmó que esperaban dos bebés, eso sí, no se dijo que sexo tendrían. De hecho el propio príncipe Alberto afirmaba no conocerlo, aunque su esposa sí y mantuvo el secreto. Con su paternidad se culmina la larga relación de Alberto y Charlene, comenzada en el año 2000, primero como amigos y luego como pareja. Contrajeron matrimonio en julio del 2011 y ahora se han convertido en padres a la edad de 56 y 36 años respectivamente. Eso sí son los primeros hijos en común, ya que el Príncipe tiene dos hijos de relaciones anteriores.
Seguro que en los próximos días podemos ver a los pequeños. Estaremos atentos.