Cada día más niños en todo el mundo padecen asma. Y esto es así debido a numerosos factores, entre ellos la contaminación ambiental. Se trata de una enfermedad que no solo causa diferentes molestias sino que además en algunos casos puede ser fatal. Por esos es muy importante que se siga investigando sobre ella.
Clara mejoría
Investigadores de la Universidad de Chicago en Estados Unidos han realizado un estudio en el que han visto cómo la extirpación quirúrgica de las amígdalas en niños que tienen apnea del sueño y asma hacía que mostraran el primer año después de la operación un 38% menos de un estado asmático agudo.
También se pudo ver que hubo un 36% menos de hospitalizados en relación a esa dolencia y un 26% menos de visitas a centros de urgencia. Al mismo tiempo se comprobó que otros pequeños que no se habían operado no presentaban variaciones considerables en su estado. Se observó que esta intervención reducía tanto la apnea como los síntomas del asma, y que de esta manera se podría reducir la dependencia que tienen los enfermos de la medicación.
Una enfermedad con gran incidencia
Se considera que éste es el mayor estudio que se lleva a cabo sobre este tema, ya que se incluyeron los datos de más de 40.000 niños de entre 3 y 17 años, de los cuales 13.506 se sometieron a la intervención comentada. Y es que es un tema que preocupa enormemente, ya que el asma es la tercera patología pediátrica con más incidencia en Estados Unidos y que según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades afecta a más de 7 millones menores de 18 años. También es la tercera causa que más hospitalizaciones produce en los niños estadounidenses de menos de 15 años y que supuso en el año 2009 la cifra de 770.000 visitas a los servicios de urgencia. Además, tiene un alto coste económico: unos 50.000 millones de dólares al año.
A la vista de estos datos resulta positivo que se investigue para paliar en la medida de lo posible los efectos del asma en los niños. Esperemos que se siga haciendo y con éxito.