Hola corazones, hoy os traigo un relato especialmente inspirador para mí.
Me pregunto cuantas de vosotras trabajáis, cuantas habéis decidido quedaros en casa cuidando a vuestros pimpollos y cuantas… bueno ya sabemos cuál es la situación hoy en día. Desde luego aquí en España, la crisis agudiza y por desgracia muchos de vosotros estáis al cuidado de vuestros hijos porque no os queda otro remedio, ya que es complicado encontrar trabajo hoy en día ¿verdad?
Habéis visto en mi Facebook que el otro día estuve un lugar de ensueño. En la Boca de Fresa. Y digo de ensueño porque a parte de que soy muy golosa, la boca de Fresa es un taller de repostería de diseño regentado por Mónica Tenreiro, con una decoración exquisita en la que me siento como en mi propia casa.
Yo conocí a Mónica hace casi un año. Mi prima Diana, mamá de dos preciosos hijos, había reservado plaza en su taller para que nuestros niños hicieran un curso de galletas de navidad. Yo enseguida me entusiasmé con la idea, pero llegado el día… ya sabéis como son los niños… hubiera tirado por la ventana a mi hijo Joaquín. Como hacen muchos niños, al enfrentarse a una situación nueva, se puso de morros en una esquina del taller haciendo que todas las mamás me apuntarán con el dedo. No de forma real claro, pero esa era mi sensación. Portándose como un niño malcriado, haciendo dudar a los demás de mis cualidades como educadora. Bueno sobre este tipo de situaciones ya hablaremos otro día. El caso es que Mónica, lejos de poner mala cara, se portó superbien. Con una paciencia infinita, se acercó a hablar con él para tranquilizarlo. En cuanto yo me fui, Joaquín se portó como lo que es, un niño bueno y cariñoso. ¡Para matarlo! ¿A que sí? El caso es que en ese momento me di cuenta de que Mónica tenía que ser madre, y además, una madre excelente.
Pasó el tiempo y yo acudí a otro curso y además le encargué varias tartas, todo perfecto por supuesto. Y el otro día, como os comentaba, fui a hacer el “Curso de tartas iniciación”. Mi primera intención era realizar un post sobre mi experiencia de repostera pero ocurrió algo…
Una de las asistentes le preguntó si ella había sido repostera siempre y Mónica le contestó: “No, en realidad todo empezó cuando mis hijos eran pequeños. Ponía todo mi empeño en prepararles las mejoras fiestas de cumpleaños. Y de hecho no faltaba ninguno de sus amiguitos, mis fiestas se estaban haciendo famosas…” Enseguida su marido, que siempre ejerce de ayudante y reportero en estos cursos, nos interrumpió porque el tiempo se nos echaba encima. Pero yo me quedé con ganas de saber más. Y al día siguiente le mandé un e-mail para que me contara su maravillosa historia. Y esto fue lo que me contestó:
“Como te conté todo empezó con las fiestas de cumpleaños de mis peques, siempre tratamos que fuesen muy especiales, algunas de ellas tardamos meses en prepararlas. La verdad es que salían muy chulas no fallaba ningún niño, algunos hasta enfermos venían, al final se hicieron famosas en el cole.
Según fuimos perfeccionando las fiestas fuimos añadiendo la parte de repostería a las mismas. Básicamente este fue el principal motivo para iniciarme en el mundo de la repostería. Empecé a hacer cursos y algunas madres a pedirme tartas, y cuando vi que esto empezó a moverse mucho, tomé la decisión de empezar este negocio. Pasar de ser un hobby a un negocio no fue tarea fácil, Permisos de sanidad, hacienda, autorización del ayuntamiento … etc. es como una especie de calvario.
Y aquí estoy luchando con la crisis, la competencia ilegal, las clientas, pero con muchísima ilusión. Tengo que reconocer que esta actividad me da muchísimas satisfacciones. Tenía muy claro que para lanzar el negocio tenía que basarme en el mundo de internet, Es la mejor forma de llegar a mucha gente con poca inversión, Empecé con el blog, continúe con la web y actualmente Facebook es una gran fuente de información para mi. Tengo 650 seguidores en Facebook y en este momento mi blog recibe aproximadamente unas 10.000 visitas al mes. De cara al futuro, mi reto es hacer cada vez cosas más complejas, y ser un referente para aquellas personas que deseen una repostería de alta calidad y diseño y para eso, tengo pensado dedicar parte de mi tiempo a mejorar mi formación. Recientemente he lanzado un nuevo proyecto que es la Academia de La Boca de Fresa donde el objetivo es enseñar a la gente que se inicia en el mundo la repostería creativa.
Por último decir que sin el apoyo de mis hijos y sobre todo de mi marido hubiese sido imposible realizar este sueño.”
(Podéis seguirle en www.labocadefresa.blogspot.com, en www.labocadefresa.com o en facebook.)
¡¡¡No os parece una pasada!!! Yo ya os digo que para una mamá cualquiera, y ya no mamá, una empresa, etc… conseguir 650 seguidores en Facebook es superdifícil. Y bueno, dar el paso de mamá, a mujer emprendedora, me parece fascinante. Y además tiene grandes retos, que es la única manera de mantener vivo un negocio. Por eso os digo que nunca se sabe. Hace dos días escuchando el discurso de mi queridísimo profesor de Analitycs Chema Carratalá (@Chema_), decía “Las oportunidades están para aprovecharlas”. Así que no debéis conformaros, debéis hacer todo lo que esté en vuestra mano por conseguir vuestros sueños. Como dice Mónica, el pasar de tener un Hobby a tener “Un trabajo” no fue fácil, pero tenemos que intentarlo. Y hablando de oportunidades, acabo de ver en Twitter un nuevo enlace de Cuidadoinfantil.net animándoos a que escribáis en su blog, ESO… ES UNA OPORTUNIDAD.
Oportunidad de daros a conocer, de generar vuestra Marca Personal y no digo nada en cuanto a satisfacción personal. Así que no la desaprovechéis y subiros al carro de las mamás que estamos buscando un futuro en algo que nos apasione.
Espero que os haya gustado e inspirado como a mí.
Mil besos de Fresa.
Angélica (Mama de Fresa)